Hasta el siglo XVI no se comenzaron a escribir los romances. El romancero viejo esta formado por todos los romances anonimos compuestos desde el siglo XIV al siglo XVI. Los primeros romances tienen su origen en el cantar de gesta y cada uno de sus versos estaba dividido en dos partes -o hemistiquios- por una pausa -o cesura- con una sola rima asonante. Como la formula del romance gustaba mucho al publico, los juglares empezaron a componer otros en los que daban noticias, recogian leyendas populares, batallas, cronicas historicas, etc. Los romances son poemas de lenguaje sencillo y en ocasiones los juglares dejaban la accion interrumpida para dar mayor misterio a sus narraciones. Algunos romances tenian inspiracion morisca, como el que narra como en el ano 1431, el rey Juan II de Castilla llega ante Granada acompanado del infante moro Abenamar, a quien habia ofrecido el trono de este reino, la cuidad se rinde y el infante es reconocido rey.

El Lazarillo de Tormes cuenta las peripecias de un joven picaro en la Espana del siglo XVI. Lazaro de Tormes ejerce de criado de los mas disimiles personajes: un ciego, un escudero, un fraile, un capellan o un alguacil. Cada personaje encarna un tipo posible de vida en un mundo cruel descrito con profunda ironia. Fue editada incompleta hasta el siglo XIX. Prohibida por la Inquisicion, su autoria se atribuye diferentes personajes como el monje Juan de Ortega, el dramaturgo Sebastian de Orozco y el humanista Diego Hurtado de Mendoza.

O cirio da porteira alumiava a custo aquela escuridao crassa e abafadora. Os tumulos alinhados em andares, chegando do pavimento ao teto, exalavam o fetido da morte. As catacumbas romanas nao poderiam conter maior numero de ossadas. Quanto ao mais, nem nome, nem algum sinal distintivo. Os mortos que ai dormiam bem mortos eram para suas familias, que nem sequer lhes podiam guardar minima recordacao. Um dos jazigos, separado dos outros e de diversa dimensao, continha a mumia de um homem Espetaculo hediondo Aquele cadaver estava decapitado Parece que o morto havia sido degolado. Pamza, voltado para a prioresa, apontou-lhe aquele tumulo. - Ha duzentos anos que este cadaver aqui jaz - disse ela. - A historia dele e legendaria, e ninguem ma soube contar. Quando o juiz, o comissario e o doutor percorriam o subterraneo, disse-lhes Maria Venzyk: - Agora conhecem os senhores este convento tanto como eu. Zolpki pegou na tocha que o doutor levava e segunda vez a perpassou ao longo das paredes. - Nada - murmurava ele. - Nada